Debido al home office hubo un fuerte crecimiento de la venta online de notebooks.
La cuarentena modificó muchos hábitos, costumbres y tareas. El traslado del trabajo diario al hogar, gracias a metodologías de home office, fue uno de los más significativos.
En las dos semanas previas al inicio del aislamiento obligatorio, ASUS, una de las compañías líderes del sector, registró un aumento del 400% en sus ventas online semanales, en comparación con una semana habitual.
En este contexto de cuarentena, las plataformas de venta digital dejaron de ser una oportunidad más de contacto con el cliente y pasaron a ser una necesidad esencial para el desarrollo del negocio.
Desde ASUS remarcaron que pese al contexto, la empresa continuará lanzando productos en el país de forma “constante”.
“Nuestros lanzamientos estarán alineados a los de toda la región, donde también se experimentaron fuertes subas de equipos de forma online aunque sin la fuerza de lo que pasó en la Argentina”, detalló. Por último, Plaul explicó que antes de fines de año llegarán al país un nuevo equipo dedicado al gaming y la segunda edición de la Zen Book Pro Duo.
En este contexto de búsquedas de notebooks, en 2020, Windows 7 y 10 siguen siendo los sistemas operativos preferidos.
Desde 2017, las empresas se limitaron a reemplazar sus antiguos dispositivos Windows 7 con nuevos equipos Windows 10.
En tanto, las computadoras Mac –del fabricante Apple- suelen ser más caras: mientras que una computadora Windows cuesta entre US$150 y US$ 250 en Estados Unidos, una MacBook cuesta desde US$ 900.
En la Argentina, el precio llega golpeado por la devaluación y la suba del dólar. En Mercado Libre, la MacBook más barata cuesta $160.000 y la más cara más de $1 millón.
La categoría más vendida es la de notebook de uso hogareño con un precio promedio de $ 25.000, la más económica.
El trabajo resalta que si se analizan los precios promedio de cada categoría de notebook en la Argentina, se obtiene un precio general promedio de $ 90.000 (unos US$ 1.400, más de 15% arriba).
Por otro lado, los profesionales y los gamers gastan más del doble que ellos. En tanto, los emprendedores y escolares mantienen su gasto debajo de los $ 40.000.